Laguna Amarga
La Reserva Natural Laguna Amarga, situada en el término municipal de Lucena, forma parte del conjunto de humedales del sur de la provincia de Córdoba, junto con las lagunas permanentes de Zóñar y Rincón, y otras estacionales como Tíscar, Jarales y Salobral. Todas ellas han sido protegidas por su importancia en la invernada y nidificación de aves acuáticas. La variedad de sus suelos da lugar a unas condiciones muy particulares que posibilitan la existencia de un gran número de aves y especies vegetales.
La Laguna Amarga es llamada así por las sales que contiene, que le otorgan un sabor característico.
En el paisaje de olivar, viñedos y cereal de la fértil campiña cordobesa, contrasta este oasis rodeados de eneas, carrizos, juncos y cañas. Sin duda, es el taraje el arbusto que cuenta con una mayor presencia, hasta el punto que ha ido ganando terreno en el cinturón perilagunar en detrimento de las masas de enea. Además posee un sotobosque que abraza el cinturón de tarajes, formado por especies mediterráneas como la retama, el lentisco o el romero, entre otras, que dan cabida anumerosos paseriformes a lo largo del año.
La vegetación acuática alimenta a numerosos animales, destacando al pez pejerrey por su rareza en las aguas continentales de la Península. La famosa malvasía, la más emblemática del espacio, se identifica por el grueso pico azulado y por su cola siempre levantada. Al borde de la extinción hace unos años, se recupera de forma ejemplar en las lagunas de Zóñar, Rincón y Amarga. Además, la Laguna Amarga acoge al porrón, la focha común, el zampullín común, el pato colorado, el petirrojo y la curruca capirotada.
Además de la avifauna, alberga un buen número de otras especies como galápago leproso, culebra viperina y culebra collar. Además también está presente un mamífero acuático como es la rata de agua.
La laguna se encuentra en el ámbito territorial de la llamada "Ruta de José María el Tempranillo".
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