Vacaciones rurales en Andalucía: el plan perfecto para oxigenarte en plena naturaleza
¿Has oído hablar alguna vez de los cortijos? Son fincas rústicas ideales para desconectar de la ciudad y disfrutar de tu estancia en Andalucía. Suelen estar situadas cerca de enclaves naturales y será tu remanso de paz tras recorrer el destino. Anota estos lugares para empezar a oler a vacaciones. ¡Vamos!
El paisaje de Andalucía es un espectáculo natural y para conservar su belleza, gran parte del territorio está protegido.
Empezando por la provincia de Málaga, encontrarás dos puntos que deberás visitar. El primero es el Parque Natural del Torcal de Antequera, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Su estampa kárstica, característica por sus moldeadas rocas calizas te dejará con la boca abierta.
El segundo que puedes incluir en tu lista es la Axarquía. A pesar de ser muy grande, puedes centrarte en la Sierra de Tejeda, Almijara y Alhama.
Siguiendo por la costa nos encontramos que algunos parques son marítimos-terrestres como el Parque Natural del Estrecho (Cádiz) o el Parque Natural de Cabo de Gata (Almería). En un pequeño trayecto podrás estar entre árboles y terminar pisando la arena. Incluso si llevas bañador ¡puedes darte un chapuzón!
Si viajas a la parte más rural e interior de Andalucía, en la Sierra Norte de Sevilla, déjate sorprender por el Cerro del Hierro. El bosque de alcornoques le da color al abrupto paisaje rocoso. Ha sido un cerro que desde la época romana ha sido sido aprovechado por la presencia de hierro, como bien su nombre indica.
No podemos dejar de nombrar la Sierra de Cazorla (Jaén), donde nace el Río Guadalquivir. Es una bonita zona para darse un paseo por los olivares que rodean a los pueblos próximos.
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