Situado a unos 3 kilómetros de Torredonjimeno, aguas arriba de los arroyos del Cubo y las Mulas, el Molino del Cubo se planta en un paraje lleno de encanto y misterio, hasta se dice que tiene fantasma. Más que molino harinero, que lo es, parece inexpugnable fortaleza construida por la Orden Calatrava en el siglo XV (1437). En realidad, como tal funcionaba, pues protegía los pasos que, desde el reino nazarí de Granada, bajaban por la Sierra de la Grana.
Aguas arriba, desde la cascada de las Mulas, mediante un caz que aún hoy se mantiene en buenas condiciones, se canalizaba el agua que caía en tromba por el cubo y movilizaba todos los engranajes del ingenio: rodezno, eje, piedras… ejerciendo sus funciones de molienda.
El Molino del Cubo se encuentra ubicado en un lugar mágico, de alto valor ecológico y paisajístico, el entorno del Molino del Cubo es un paraje ideal para pasear y descubrir los encantos propios del lugar. A tiro de piedra se encuentra el hilo viario de la Vía Verde del Aceite, buen lugar para seguir disfrutando de una buena caminata y del patrimonio natural y cultural tosiriano.