La Plaza de San Francisco posiblemente haya sido desde el siglo XVI, el corazón de la ciudad de Sevil, actuando como plaza mayor. En ella se encontraban ubicados los principales poderes civiles.
En esta plaza se celebraron los famosos autos de fe de la Santa Inquisición, las diversas fiestas de toros y cañas, y al igual que en la actualidad constituía uno de los lugares principales en la conocida como carrera oficial de las procesiones de Semana Santa y Corpus Christi.
Entre los edificios de interés que se encuentran en esta plaza destacan el Banco de España, el edificio Bar Laredo (arquitectura regionalista de Sevilla), la Casa Arcenegui (modernismo moderado y renacentista), la Antigua audiencia, y el Ayuntamiento (arquitectura plateresca con representaciones de personajes históricos relevantes que tuvieron relación con la ciudad)