La Casa Guardiola se remonta al siglo XIX, en pleno romanticismo sevillano, cuando D. Andrés Parladé y Sánchez de Quirós, Conde de Aguiar, Delegado Regio de Bellas Artes y Delegado-Director de las excavaciones de Itálica, la manda construir.
Tiene todas las características de las casas señoriales de la época, accediéndose a través del patio apeadero, por un lado al patio de caballos y por el otro a la vivienda, donde se encuentran el patio principal, loggía, jardín, salones y otras dependencias.
Visita exterior. Puede acoger eventos hasta 186 personas.