Santuario de la Virgen de Tíscar
El actual Santuario de la Virgen de Tíscar se consolidó a mediados del siglo XX y está situado en la aldea quesadeña de Tíscar, entre dos rocas impresionantes junto a la Cueva del Agua, donde según la leyenda se aparecía la Virgen sobre los restos de lo que debió ser un pequeño tempo levantado tras la reconquista cristiana.
Nuestra Señora de Tíscar es patrona de Quesada y del Adelantado de Cazorla, pero es muy venerada en toda la comarca del Alto Guadalquivir y en las provincias más cercanas de Murcia, Granada y Almería.
El templo tiene planta rectangular y sus muros se construyeron con paramento irregular de piedra. La iluminación interior se resuelve con varios óculos en el nivel superior, próximos a la cubierta. En la puerta principal, sobre el dintel, hay una imagen de la Virgen entre dos árboles, esculpida en alto relieve. Rematando esta fachada se ubicó el campanario.
En el Santuario se puede contemplar:
Portada gótica del siglo XIV.
Baptisterio con pila bautismal del siglo XVI.
Óleo "Romería de Tíscar" del pintor quesadeño Rafael Zabaleta.
Retablo con obras del pintor de Linares Francisco Baños Martos y del escultor Antonio González Orea (1956).
Cuatro lámparas votivas del siglo XVIII en plata.
Crucifijo atribuido a Alonso Cano con peana de plata del siglo XVIII.
Puertas de taracea granadina del siglo XVII.
Alicatado mudéjar del siglo XIV.
Posibles restos de las estancias donde residía Mohammed Andón.
Óleo "Cabeza de Cristo" de Rafael Hidalgo de Cavides.
Óleo "San Sebastian" de Hipólito Hidalgo de Cavides.