Otoño de senderos por los Montes de Málaga
Cuando llega el crepúsculo del año, los caminos refrescan y se vuelven aún más apetecibles. El monte norteño saluda a la ciudad desde su cima, e invita a otra clase de turismo. Un turismo más sostenible.
Quizá este macizo, tan cercano a la capital -apenas cinco kilómetros-, es el gran desconocido para muchos de sus visitantes. No así para los malagueños: los Montes de Málaga son un reclamo constante, con sus numerosas ventas y restaurantes, a desplazarse para comer en ellos, festejar reuniones familiares o reencuentros con amigos. Ahora bien, más allá de la cita gastronómica, está la cita con la caminata. Pero es que además, muchas son las actividades sostenibles que se pueden realizar en estos parajes sin agredir al entorno: ciclismo, escalada, orientación, equitación...
A través de este Parque Natural, la urbe respira. Tú, también. A falta de vías verdes ferroviarias, asoma su orografía irregular como punto clave para las rutas de senderismo de visitantes interesados en descubrir un bosque mediterráneo donde el pino carrasco es el habitante vegetal que está por doquier. Con la suavidad otoñal, el camino se convierte en un muy agradable paseo.
Mirador del Cochino
Es el privilegio de las ciudades que miran al mar. Practicar ecoturismo en Andalucía, en Málaga significa disfrutar de momentos donde la panorámica integra buena parte de los elementos tierra, agua y aire. Aquí, sintetizados en la bahía malagueña. Solamente hay que coger una bicicleta de montaña y ascender hacia este mirador... pedaleando con ganas, eso sí. Su nombre se lo debemos al jabalí, una de las especies que pueblan el monte, junto a la ardilla roja, la cabra montesa, el murciélago enano o el zorro rojo, que es una auténtica preciosidad. Lo comprobarás si tienes la fortuna de cruzarte con uno de ellos.
La Reina-El Mirlo
Monárquico nombre para un enclave, el de la Fuente de la Reina, que alcanza una altura sobre el mar de 925 metros (y es punto de arranque de una ruta de poco más de siete kilómetros). Elevada como si de un trono se tratase, la famosa fuente está rodeada de alcornocales jovenzuelos, y de más especies que conforman la flora de los Montes de Málaga, a saber: madroño, adelfillas matabuey, aladiernos, mimbreras, emborrachacabras, y un largo etcétera.
También se pueden avistar desde allí aves como el petirrojo, el trepador azul o la curruca cabecinegra, entre muchas otras. Por otro lado, hay que señalar que son las rapaces las que reinan en este ambiente; prueba de ello es la presencia del águila culebrera o del milano negro, una de las más abundantes en Europa de su estilo.
Las Contadoras
Si apetece un sendero cortito, la ruta que va del mirador Vázquez Sell a la Verja de Las Contadoras abarca apenas dos kilómetros. Se trata de un paseo agradable que además empieza y acaba en un impresionante punto -el mirador Vázquez Sell-, inaugurado en 2006. La panorámica que ofrece de Málaga es, simplemente, espectacular, en especial si te pilla allí al caer la tarde. Si eres un consumado micólogo, presta atención: en la época otoñal hay un buen arsenal de setas.
Sendero de Pocopán
Otoño es la estación ideal para pasear. También para soñar y dejarse embargar por ciertos sentimientos de nostalgia (¿por qué no?). En especial cuando llegas y te encuentras, al final de este caminito, una casita inesperada que sirve asimismo de mirador encantador. Dada la baja dificultad de la propuesta, si vas en familia y en compañía de tus peques, ¡se lo pasarán en grande! Se nos aparece, así, como una excelente oportunidad de acercar la infancia a la naturaleza; aunque sea en este pequeño fragmento de las casi 5.000 hectáreas que abarca todo el monte malacitano.
