Málaga es más que playa: los puntos naturales para visitar
La capital de la Costa del Sol es de sobras conocida por sus playas. Pero en su interior, la naturaleza brilla con fuerza. No te pierdas estos lugares:
Este paisaje es Patrimonio de la Humanidad y una de las formaciones kársticas más importantes de Europa. Un conjunto de formas imposibles que datan del Jurásico, cuando el mar cubría la zona. Paseando, verás el increíble resultado del tiempo y la erosión en la roca caliza.
Con 1.400 hectáreas, esta es la reserva natural más grande de Andalucía. Solo paseando, ya podrás descubrir la belleza de este lugar, pero los auténticos protagonistas son los flamencos. Aquí encontrarás la mayor reserva de España de esta especie y la segunda de Europa, así que no te puedes ir sin disfrutar de la belleza y elegancia de estas aves.
Esta ruta cruza el desfiladero de los Gaitanes, y durante casi ocho kilómetros, recorrerás escarpadas paredes a unos 70 metros de altura sobre el río. Pero no te preocupes, el camino está completamente restaurado para que sea seguro y solo debas preocuparte de disfrutar de las vistas.
Este precioso monumento natural es el principal atractivo de la ciudad de Ronda. Muchas personas se quedan en el puente para admirar las bellísimas vistas, pero te invitamos a entrar en el desfiladero. Una vez dentro del Tajo, podrás observar aves como el buitre leonado y pasear con el rumor del agua del río Guadalevín.
Como ves, en Málaga hay muchos lugares naturales que merecen la pena. Y estos solo son algunos de ellos.