La Basílica Paleocristiana de Coracho es un yacimiento supone una de las primeras basílicas constantinianas de Hispania y uno de los pilares básicos para el conocimiento y la difusión del origen del cristianismo en la Península Ibérica.
Actualmente el visitante puede encontrarse la planta basilical de una Iglesia, asociada a una necrópolis, situada entre los siglos IV y VII.