Situada entre la Costa del Sol y la Costa de Almería, la Costa Granadina es popularmente conocida como la Costa Tropical por sus especiales condiciones climatológicas, que la convierten en un territorio único en toda Europa en el que se da el cultivo de frutos tropicales como el aguacate, la chirimoya o el mango.

A consecuencia de su clima particular, el paisaje natural de su entorno nos regala postales preciosas que, acompañadas de su riqueza cultural y la gran variedad de actividades que se pueden realizar, convierten a este territorio en el destino ideal para pasar unas maravillosas vacaciones.

Una visita al legado cultural de la Costa Tropical

La Costa Tropical se compone por un extenso territorio formado por diecisiete municipios, entre los cuales se encuentra alguno de los puertos históricamente más relevantes para la comunicación entre el Reino de Granada y el Norte de África. Estamos hablando de Almuñécar, Salobreña y Motril, poblaciones en las que hoy en día se conservan gran cantidad de restos arqueológicos y monumentales testimonio del esplendor de su pasado histórico.

Salobreña, al igual que las demás poblaciones que forman la Costa Tropical, ha sido conquistada por diferentes pueblos a lo largo de su historia, gracias a su privilegiada situación geográfica. De origen fenicio, Salobreña pasa a ser conquistada en poco tiempo por los romanos y posteriormente por los musulmanes.

De esta última etapa, la Salobreña musulmana conserva este castillo de carácter defensivo que, en su momento, albergó además un palacio de época Nazarí. Situado en lo alto del pueblo ofrece unas espectaculares vistas de la costa que no os debéis perder.

En Salobreña os encontraréis pintorescos rincones de postal que os sorprenderán a medida que ascendéis a la parte más elevada de su centro histórico.

Esta preciosa villa de la Costa Tropical respira arte por los cuatro costados, y así, en sus callejuelas os encontraréis inesperadas galerías de arte en las que apreciar el talento de sus artistas, visitando incluso sus talleres...

Y, por supuesto, podréis llevaros a casa una muestra de su talento creativo.

Pero, si además de la pintura os apasiona la historia y la arqueología, en el antiguo edificio del ayuntamiento de la villa, se encuentra el

Museo Histórico Villa de Salobreña

Museo Histórico Villa de Salobreña, en el que os encontraréis una importante muestra arqueológica que os transportará a la época de las colonizaciones fenicia y romana. Podréis observar también piezas de artistas salobreños, entre las que se encuentra una maqueta del castillo.

Antes de despediros de la preciosa Salobreña, disfrutad de una vista panorámica desde lo más alto de la villa.

De Salobreña a Almuñécar, originariamente conocida por el pueblo fenicio como Sexi,  se sitúa en la unión de los valles formados por los ríos Seco y Verde, en los cuales se encuentran enormes campos de cultivos de frutos tropicales. La historia de Almuñécar la sitúa como un enclave patrimonial de referencia en toda la Costa Tropical.

De todo esto y mucho más os informarán en la oficina de turismo, alojada en una antigua casa neo-árabe que recoge toda la tradición constructiva de las típicas casas-jardín musulmanas. No dudéis en acercaros a su interior para que os aconsejen un plan romántico inolvidable para una escapada en pareja perfecta.

Antiguas fábricas de salazón de pescado, acueductos, teatros, foros, templos han dado lugar a la necesidad de construir una plataforma sobre la que situar todas estas edificiaciones. La plataforma fue reforzada con un complejo sistema abovedado en su interior y hoy en día este espacio urbano es lo que conocemos como Cueva de los Siete Palacios, que en la actualidad aberga el Museo Arqueológico de Almuñécar.

En pleno Parque Botánico-Arqueológico nos encontramos los restos de la Factoría de Salazón de Pescado El Majuelo. Durante la época romana, Almuñécar basó su economía en la salón del pescado y en esta factoría se elaboraba un valioso paté de pescado llamado Garum, que se exportaba a todo el imperio.

Por su ubicación y su clima especial, en toda la Costa Tropical, Almuñécar nos sorprende por su riqueza paisajística y botánica. Os animamos a visitar el hermoso Jardín Botánico de El Majuelo.

Además, como buena ciudad de origen fenicio, Almuñécar está abierta al mar y por tanto, a otras culturas y civilizaciones; por ello podréis visitar el hermoso Jardín Museo del Bonsái. En él apreciaréis especies asiáticas, europeas, autóctonas y de toda la costa mediterránea, una auténtica experiencia para los sentidos.

¿Nos vamos de shopping?

Los amantes de los productos delicatessen tendréis la posibilidad de visitar las diferentes tiendas que ponen a vuestra disposición productos gourmet, para que vuestros paladares exquisitos degusten los ricos manjares de la gastronomía local. ¡No os los perdáis!.

¿Os gustaría decorar vuestra casa al más puro estilo de la Costa Tropical?. Home Andalu Living es una boutique de decoración en la que encontraréis todo lo necesario para que vuestro hogar brille con la luz de la costa granadina 365 días al año.

Viajamos ahora hasta Motril, la población más grande de la Costa Tropical, cuya historia está también muy ligada en su origen a la Taifa de Granada, época en la que se introduce en el territorio el cultivo de la caña de azúcar y la producción de seda.

Por aquel entonces se construyeron diversas mezquitas, baños públicos, una muralla y una alcazaba que servía de residencia a la reina Aixa Alhorra, madre de Boabdil. Precisamente, sobre el enclave de la antigua alcazaba, se alza ahora el Santuario de Nuestra Señora de la Cabeza, que alberga un maravilloso camarín decorado con yeserías barrocas.

Situado en la falda del cerro de Nuestra Señora de la Cabeza, se encuentra el Parque de los Pueblos de América, un auténtico homenaje arbóreo a la botánica americana. Dad un romántico paseo a lo largo del parque, abrigados bajo la sombra de diferentes especias exóticas traídas del continente americano.

Sus maravillosos jardines se encuentran vestidos con impresionantes esculturas que harán vuestro recorrido aún más agradable... pero, caminad atentos porque os puede sorprender encontrandoos con todo tipo de conciertos y espectáculos al aire libre.

Otra forma de conocer Motril, es sobre dos ruedas. Para los amantes del ciclismo, ofrece una gran variedad de rutas, por ciudad, playa e incluso montaña. ¿Os animáis?

Disfrutad de una jornada de golf en pleno corazón de Motril , ¡un corazón grande y verde!. Los Moriscos Club de Golf os espera para pasar un día diferente en la Costa Tropical.

La Costa Tropical, una joya natural...

 Por sus especiales condiciones climatológicas, la Costa Tropical es rica en espacios naturales únicos, como es el caso del Paraje Natural de los Acantilados Maro Cerro Gordo, ubicado en La Herrera. Ven a descubrir este espacio de bosque mediterráneo de 12 kilómetros de largo que penetra una milla en el interior del mar formando espectaculares acantilados, que dan lugar a pequeñas calas paradisíacas. En la ladera de la montaña, además, se pueden observar terrazas cultivadas a diferentes alturas.

Con más 70 kilómetros de litoral, la Costa Tropical ofrece una gran cantidad de espacios acantilados, playas y calas en las que disfrutar de cualquiera de sus 320 días de sol al año. Muchas de sus playas además, ofrecen todos los servicios que harán más cómoda nuestra jornada en la playa como, por ejemplo, la de Calahonda, la Guardia, Cotobro, Torrenueva, la Velilla o la Charca. ¡Ven y descúbrelas!

¡Venid a conocer los cultivos tropicales de la costa granadina!

Venid a conocer los cultivos únicos en toda Europa de frutas tropicales. Chirimoyas, aguacates y mangos, son algunos de los productos que podemos encontrar en esta zona y que os sorprenderán por los paisajes coloridos y frondosos que regalan sus plantaciones.

Ubicada en la Herradura, con espectaculares vistas sobre la Bahía, se encuentra la Finca San Ramón en la que se cultivan diferentes tipos de frutos tropicales. ¿Os gustaría visitar la plantación y degustar chirimoya, papaya, aguacate o un delicioso mango granadino? Si es que sí, no dudeís entonces en venir a esta finca, os recibirán con los brazos abiertos y cestas repletas de fruta.