Monte La Sierra
El parque periurbano Monte La Sierra es un pequeño paraíso ecológico a pocos kilómetros de la capital jiennense. Los cambios de paisaje se suceden en este espacio, pasando de relieves abruptos y accidentados a formas suaves y alomadas. Desde el barranco de Otíñar hasta el embalse del Quiebrajano se alza una topografía de continuas y escarpadas pendientes.
Presenta una vegetación típica del monte mediterráneo con encinas, quejigos y acebuches, que alternan con pinares de repoblación y con una interesante población de cornicabra y sabina. La fauna con mayor presencia son la cabra montés y el jabalí, mientras que en las copas de los árboles se cobija la ardilla y más arriba, en el cielo, vuelan el águila perdicera y el azor.
Los inmensos barrancos, con paredes casi verticales, brindan la oportunidad de practicar la escalada gracias a las numerosas vías abiertas. Entre las cuevas existentes se conservan algunas muestras de arte rupestre, como en la Cueva de los Herreros.
El dibujo del paisaje de esta sierra está también condicionado por dos valles, el del río Quiebrajano y el de la Cañada de las Hazadillas. Al estrecho barranco horadado por el primero de ellos, se asoma el mirador del Vitor con unas excelentes panorámicas del entorno. Además, en sus inmediaciones se encuentra un interesante dolmen correspondiente al Neolítico. En el valle de la Cañada de las Hazadillas se encuentran diversas instalaciones para el ocio y la educación ambiental (hornillos, mesas, bancos, mobiliario recreativo, fuentes y kiosco, entre otras instalaciones), además de diversas rutas para senderismo o cicloturismo.