Huétor Vega

Huétor Vega se encuentra en el espacio que tradicionalmente se ha conocido como La Campana granadina, término que antiguamente aludía a las tierras jurisdiccionales de una parroquia; con una visión más romántica, se ha dicho que La Campana comprendía todo el territorio del entorno de Granada donde se oía el tañido de la campana de la Torre de la Vela de la Alhambra.

Esa alusión a la proximidad de la capital granadina que manifiesta cualquiera de las dos interpretaciones, se cumple sobradamente en el caso de Huétor Vega: situada entre Sierra Nevada y Granada, a menos de 4 kilómetros de la ciudad de la Alhambra. La localidad se sitúa al pie de suaves colinas que ascienden hacia la Sierra, y al borde mismo de la vega granadina, por donde corre el Río Monachil.

Por la parte alta del pueblo discurre el Camino de los Neveros, utilizado durante siglos en verano, para el acarreo de nieve a la ciudad de Granada. Este camino es uno de los accesos más cómodos a Sierra Nevada para senderistas y cicloturistas, por transcurrir por suaves pendientes que facilitan la ascensión.

Historia

Los árabes poblaron la vega Granadina de numerosas alquerías que son los núcleos originales de los actuales pueblos como Huétor-Vega, que en época musulmana se llamó " Hins-Watha ". Se establecieron aquí durante más de 700 años y crearon una red de acequias que aún perviven, perfectamente reguladas por decretos o dulas. En las tierras de secano producían olivos y vides y en la vega moreras y todo tipo de frutales y hortalizas.
Tras las capitulaciones en Santa Fe en 1.492, los moriscos granadinos viven malos tiempos hasta su expulsión definitiva por Felipe II en 1.570, con lo que el 1 de Noviembre, los últimos moriscos de Güetor-Caxar que así se denominaba la villa, son reunidos en la Iglesia y conducidos fuera del Reino. A partir de este momento, todo quedó prácticamente despoblado y los campos y acequias inservibles. Para solucionar este problema, Felipe II manda repoblar estos lugares con gentes venidas de Andalucía, Castilla, Aragón y Levante.
De esta época datan los primeros documentos escritos de nuestro pueblo, los Libros de Apeos (Real Chancillería de Granada), escritos en 1.572 por D. Alonso de Frías ante el juez D. Alonso de Villalba. En ellos se detallan las propiedades, haciendas y población, así como el amojonamiento y deslinde del pueblo y las condiciones explicitas en las que se mandó repoblar los alrededores de Granada.
Los siglos XVII y XVIII son años de producción agrícola en Huétor-Vega (lino, cáñamo, vino y aceite, y toda la industria que ello genera). A mediados del Siglo XIX, el pueblo cuenta con unos 1.000 habitantes, dos molinos harineros, uno de aceite y varias casas de recreo que hacen las delicias de los visitantes granadinos.
A principios del Siglo XX se produce un profundo cambio en la forma de vida de los Hueteños. La revolución industrial (Electricidad desde 1.895) hace necesaria la adaptación de los cultivos (remolacha, patata, tabaco).
En 1.922 se inaugura la línea de tranvía eléctrico que une nuestro pueblo con la ciudad, y con ello la mejor comercialización de los productos. Esta línea permanecerá abierta hasta 1.974.
En 1.960 se canaliza el Río Monachil y llega el agua potable a Huétor-Vega. En los últimos 40 años se ha dotado al Municipio de infraestructura y equipamiento social, cultural y deportivo. Se han adecuado los saneamientos, calles, jardines, parques y carreteras, construido 2 grupos escolares, el nuevo Ayuntamiento, la Residencia de la Tercera Edad, el Centro Social y el Centro de Salud de atención primaria.
Por su cercanía a Granada, Huétor-Vega se ha convertido en zona residencial, así como en municipio de fuerte crecimiento poblacional y notable desarrollo económico.