Granada inmensa. 4 delicias que ver y saborear si vienes a la provincia granadina.
Es un placer para todos los sentidos visitar la provincia de Granada, desde el pico más alto de la península ibérica, Mulhacén con 3482,6 metros, en el Parque Nacional de Sierra Nevada, hasta llegar al nivel del mar en sus más de 70 kilómetros de costa.
Además de la ciudad de Granada y la visita obligada a la Alhambra, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, puedes conocer el barrio de Sacramento, es uno de los barrios gitanos que da origen al flamenco y el cante jondo.
Para disfrutar de la naturaleza, házlo en Sierra Nevada. En verano disfrutarás de rutas por senderos de gran belleza, y en invierno esquiarás en un mismo paisaje totalmente nevado.
Si tu plan es tomar el sol, encontrarás grandes playas o pequeñas calas para disfrutar de un chapuzón en el mar mediterráneo, como en la playa de San Cristóbal, en la ciudad de Almuñécar, con vistas al Peñón del Santo.
Por otra parte, la playa de la Rijana, al lado de un precioso acantilado, es perfecta para hacer snorkel con aguas claras y cristalinas, con poca gente y con gran espacio para tu toalla y la de los tuyos.
Cerca de esta playa, existe una curiosidad sobre el pueblo llamado La Mamola, un nombre prohibido por los pescadores, ya que tienen la creencia de que trae mala suerte y no se pescaría nada ese día, así que se refieren a él como "El pueblecillo" o "Fuera de España".
Y si lo que te apasiona es la gastronomía, un plato granadino son las habas con jamón o el remojón granadino, que te dejará con ganas de conocer más la cocina andaluza, donde a veces puede ser más sencilla pero siempre deliciosa. Acércate a La Bodega de Antonio 1, en la ciudad de Granada o en el Restaurante Los Geraneos, en Almuñécar para degustar este plato.