Laguna de Fuente de Piedra
La Reserva Natural Laguna de Fuente de Piedra, la más extensa de Andalucía con sus 1.400 hectáreas, constituye un enclave único dentro de los humedales del Mediterráneo Occidental. En ella se localiza la mayor colonia de flamencos de toda la Península Ibérica y la segunda en importancia de Europa tras la existente en Camargue, Francia. Pertenece al conjunto de lagunas de la zona de Antequera, que abarca otras reservas naturales que suman un total de 3.000 hectáreas de humedal.
De forma elíptica, entre sus principales características se cuentan el carácter endorreico y la salinidad y temporalidad de sus aguas, que se recargan gracias al aporte de las lluvias, la colabotación de los arroyos de Santillán y El Humilladero, y al flujo subterráneo procedente de un acuífero. El aumento de la evaporación del agua en primavera hace que la sal quede cristalizada sobre la superficie, lo que ha favorecido su explotación industrial desde época romana hasta la década de los cincuenta del siglo pasado, como así atestiguan diferentes estructuras.
La vegetación adaptada a ambientes salinos es la más característica de este medio, constituyendo la parte principal de la orla lagunar. Sobre los suelos arcillosos de la laguna se desarrollan plantas como la sosa de las salinas, la sosa o la alacranera; junto a otras propias de un pastizal de climas áridos y secos. Asociada a los límites de la laguna y adentrándose en sus aguas, aparece la vegetación arbórea característica, que está formada por tarajes. En ocasiones llegan a formar espesos bosquetes constituyendo áreas que resultan muy importantes durante las épocas de reproducción de gran número de especies de aves.
Los mamíferos tienen una distribución importante, directamente relacionada con el nivel de transformación del entorno por la agricultura. Se ha constatado la presencia de lirón careto y rata de agua, además del conejo y la liebre que son muy abundantes en todo el perímetro de la laguna. El zorro y el tejón son los mamíferos predadores más característicos del área.
Pero serán las aves las que tengan una mayor presencia, con más de ciento setenta especies catalogadas, entre las que destacan las aves acuáticas. En la actualidad, constituye el enclave más importante donde se reproduce con regularidad el flamenco común. Además, pueden observarse otras acuáticas como malvasía cabeciblanca, garza real, gaviota picofina, pagaza piconegra, cigueñuela, ánsar común y pato cuchara. Otras aves visitan la laguna durante el periodo invernal o bien durante los periodos de paso migratorio; es el caso de numerosas rapaces y limícolas.
De características similares son las vecinas lagunas de Campillos y de La Ratosa, que actúan de forma complementaria junto con ésta en el mantenimiento de las comunidades de aves acuáticas. También, en sus inmediaciones, hay una serie de lagunas como El Laguneto y Cantarranas.