El Puerto de Santa María, el territorio de Rafael Alberti
Poeta del pueblo, revolucionario, irrenunciable en su compromiso político y social, pasó 36 años en el exilio.
Rafael Alberti (El Puerto de Santa María, Cádiz, 1902-1999)
Un poeta libre
Amigo eterno de Federico García Lorca, Salvador Dalí y Luis Buñuel, a los que conoce en la Residencia de Estudiantes de Madrid, perteneciente a la Generación del 27.
Alberti pasa su niñez en El Puerto, que lo marca de por vida, a donde regresó una vez recuperada la democracia. Es diputado a Cortes por el partido comunista. Con el poemario Marinero en tierra (1924) consigue el Premio Nacional de Literatura. Toda su obra está impregnada de las salinas, la bahía y el mar gaditano. Era su vida, su otra vida.
Con sabor a sal
Contaba Alberti que nació en una "inesperada noche de tormenta” y en "uno de esos blancos puertos que se asoman a la perfecta bahía gaditana”. Este es el mundo de su niñez, asomado al mar, rodeado de bodegas (su familia eran bodegueros venidos a menos). Vivió en la calle Santo Domingo, en una casa luminosa, típica andaluza, donde ahora está la Fundación que lleva su nombre.
Marinero en tierra
"Cuando apenas tenía 15 años me arrancaron del mar convirtiéndome para siempre, desde entonces, en un marinero en tierra”, escribe Rafael Alberti. Marcha a Madrid y atrás deja las playas de La Puntilla y Valdelagrana, los pinares y las Dunas de San Antón, el sabor a mar de las noches eternas mirando la luna, con los rumores del Guadalete que muere en el mar, surcado por un pequeño vaporcito que lleva paisanos y pasajeros despistados por la bahía gaditana. De estos recuerdos, de aquellas vivencias escribe Mar y Tierra, su primer libro, convertido después en Marinero en tierra (1924).
La arboleda perdida
Sus recuerdos siempre están en Cádiz, en su bahía y más cuando en el año 1940 se exilia a Argentina. Muy cerca le está su ciudad, sus marineros, su gente y en La Arboleda perdida (1975) explora en su memoria infantil y se adentra en los primeros años del exilio. Rafael Alberti vuelve a España y es elegido diputado comunista por Cádiz (1977), renuncia al escaño para seguir siendo "un poeta en la calle”. Son años de reencuentros, de recuperar la arboleda que nunca había perdido, al menos en la memoria.
Para perder el "sentío"
Recuerdan los lugareños que era usual ver pasear por la "Ribera del Marisco” al poeta, de charla con viejos pescadores. Este es un lugar para perder el sentío. Y aunque en la obra del poeta los recuerdos gastronómicos son muy justos, habrá que decir que en El Puerto de Santa María hay cerca de 80 restaurantes, algunos de los cuales bordan el caldillo de perro, la piriñaca, y la tortillita de camarones. Hay momentos en los que es imprescindible recorrer sus calles: el Carnaval; la Semana Santa, con el ritmo de los golpes de cayados; fiesta de los Patios; la Feria de Primavera y la procesión marítima del Carmen. Y si quiere sol, playa y mar, 16 Km. de playa de arena fina y dorada.
Paseo 1: Fundación Rafael Alberti - Castillo de San Marcos - calle Larga y Cielos - plaza de los Jazmines con el Palacio de Medinaceli.
Paseo 2: Vaporcito del Puerto a Cádiz, por la Bahía - playas de Puntilla y Valdelagrana - desembocadura del Guadalete - Dunas de San Antón - Marismas de los Toruños y Pinar de la Algaida - playa los Toruños - playa de Vista Hermosa - Puerto Sherry.
Paseo 3: Iglesia Mayor Prioral – Puerta del Perdón - Monasterio de la Victoria - plaza del Polvorista (con los palacios de Vizarrón o Casa de las Cadenas; de Aguado o conde de Montelirios - Cuartel de Caballería.
Paseo 4: Antigua Lonja (Pescadería Vieja y "Resbaladero”) - Mercado de abastos - plaza de toros con aire de coliseo romano - Ruta del Vino y del Brandy.
