La Plaza de la Alameda es un espacio más abierto y común de los coineños y coineñas, y así lo ha sido históricamente.
En esta emblemática plaza se encuentran las dos últimas Casas Consistoriales así como los últimos vestigios que quedan de arquitectura decimonónica.
De especial relevancia en esta plaza son la figura del Sagrado Corazón de Jesús, comúnmente conocida como “el Santo de la Alameda” y la hermosa fuente que preside la plaza, cincelada con mármol de las canteras de Coín y que, además de ser la más bella y monumental de todas representa la traída del agua potable a Coín a sus plazas públicas, con todo lo que ello supone, además de embellecer el entorno, como medida ilustrada de contenido social, higiénico y sanitaria.