Brandis del Condado de Huelva y licores artesanos de la Sierra de Aracena
La tradición vinícola del Condado de Huelva es ampliamente conocida en todo el territorio nacional y andaluz, convirtiendo la comarca onubense en una visita imprescindible para los amantes de los buenos caldos.
Ya desde la Edad Antigua, las tierras bañadas por el Golfo de Cádiz han sido lugar de cultivo de vid y comercio de vino, viajando incluso hasta el continente americano con los primeros navegantes. Una arraigada herencia que se ha transmitido durante generaciones hasta llegar a nuestros días.
Hoy, una de las especialidades de mayor calidad es el brandi, que en el municipio de La Palma del Condado, centro geográfico de la comarca, alcanza el grado de delicatessen. Este aguardiente, única bebida espirituosa que se obtiene por medio de la destilación de la uva, es categorizado sin lugar a dudas como uno de los productos más apreciados y con mayor demanda de la zona.
Numerosas son las bodegas que se dedican a elaborar y envejecer el vino de forma tradicional, en barricas de roble, a la par que organizan jornadas de puertas abiertas en sus instalaciones para todos los interesados en descubrir el fascinante mundo del vino, o bien en deleitarse con sus delicados sabores.
El toque dulce de los licores onubenses
Igual de exquisitos son los licores de la sierra onubense. Los pueblos de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche se jactan de poseer una gastronomía rica donde el jamón ibérico y los aguardientes son dos de sus grandes protagonistas. Frutos como las guindas, moras, nueces, y cerezas se emplean para obtener licores totalmente caseros. Incluso se considera que alguno de ellos posee propiedades medicinales contra dolores y cólicos.
Además, muchos de los dulces típicos de la zona como las tortas y los roscos cuentan con el toque especial de estas bebidas, dotándolos de un sabor diferente y especial que los más golosos sabrán apreciar.