Acerolo del Cortijo de las Iglesias
El Acerolo del Cortijo de Las Iglesias está con todo derecho en el listado de Árboles y Arboledas Singulares de Andalucía, pues alcanza un tamaño mayor al habitual en su especie. Presenta un tronco columnar de grosor considerable, ya que sobrepasa el metro de perímetro. En la cruz se diferencian dos ramas principales, una de ellas crece en vertical mientras que la otra lo hace ligeramente inclinada. Ambas aparecen muy ramificadas y forman una copa circular que, durante el período en el que se mantiene las hojas, suele tener un denso follaje, llegando a alcanzar una altura total de 6,75 metros.
El Acerolo esta situado en el camino de acceso al cortijo de Las Iglesias, en el término municipal de Armuña de Almanzora. En su margen derecha posee un talud acusado en el que se puede apreciar el acerolo, a cuyo pie discurre un canal de riego. Los alrededores de la cortijada están cultivadas de cítricos y olivos, delimitados por setos de chumberas que se extienden también por la orilla del carril, y con una zona ajardinada con palmeras y cipreses.
La cercanía del municipio a la cabecera del río Almazora se plasma en la vegetación más frondosa, si cabe, de sus orillas, dejando ver por primera vez, plantaciones de chopos en el lecho fluvial. El topónimo que define este municipio, de clara significación árabe, alude a huerta fértil y no hace sino constatar una realidad aún hoy palpable. En su entorno es subrayable la presencia de las ruinas de su importante fortaleza, hoy ya casi por completo desaparecida, y la Vía Verde del Almanzora, en el cercano Serón.
Este singular ejemplar botánico forma parte de un excelente conjunto de árboles singulares que salpican el Valle del Almanzora y sus vertientes: Acerolo del Cortijo de las Iglesias, Cornicabra del Puente de El Valle, Encina de El Marchal de El Abogado, Chopo de El Marchal de El Abogado, Encina de la Fuente el Pino, Encina de los Trébedes y Olivo de las Lomas.