Iglesia de San Antonio de Padua
Construida a mitad del s. XVI y restaurada en el s. XVIII, sus grandes dimensiones han hecho que se le conozca como "la Catedral".
Presenta planta basilical con tres naves. Se cubre con bóvedas de medio cañón y de aristas, separándose las naves por arcos de medio punto sobre pilares. Las calles laterales de la fachada, llevan dos campanarios octogonales con tejadillos de teja morisca. En los sótanos del interior hay un cementerio antiguo, donde cuenta la tradición que, tras el enterramiento y después de muchos años, los cadáveres han aparecido embalsamados e intactos. Se conservan dos momias en buen estado en el Panteón de la Iglesia.
En el templo también se conserva la pila bautismal donde se bautizó Fray Leopoldo, lo que trae hasta esta iglesia a numerosos peregrinos de toda Andalucía.