Adelfal de Cuadros y Cornicabral de Mágina
Situada al sur de la provincia de Jaén, entre montañas calizas y extensos olivares, Sierra Mágina atesora dos magníficas masas boscosas que son protagonistas de la grandísima biodiversidad ibérica: el Adelfal de Cuadros y el Cornicabral de Mágina. El término municipal de Bedmar y Garcíez cobija a estos dos ‘bosques con duende’.
El Adelfal de Cuadros es, por su extensión, unas 2,5 hectáreas, uno de los más destacados de toda Europa. Las adelfas se caracterizan por crecer cerca del agua, en el borde de ríos y arroyuelos. Por ello, el adelfal gira en torno al cauce del río Cuadros, desde su mismo nacimiento. Muy recomendable es su visita durante los meses de primavera, cuando flores de distintas tonalidades, que van del rosa hasta el blanco, este menos común, tiñen y motean los márgenes del río.
En la zona se puede disfrutar de una agradable caminata bajo la sombra de las adelfas. Y es que, en algunos tramos del sendero, las ramas de estos arbustos se entrecruzan tejiendo sobre nuestras cabezas un verdadero túnel vegetal. En verano ofrece un paseo muy apropiado para refugiarnos del sol.
Desde el sendero y en la lejanía, pueden observarse la ermita y la torre vigía de Cuadros, en épocas pasadas punto de control fronterizo con el Reino Nazarí. Y próximo al cauce del río, visitantes y aficionados a la espeleología pueden adentrarse en la llamada Cueva del Agua. Se trata de una singular cavidad rocosa, con cascadas y formaciones espectaculares, que el río ha ido modelando a lo largo de un tiempo que se escapa de la lógica humana, pero no de la geológica. También es punto de partida para varios senderos señalizados que ascienden a las cotas más altas de la provincia.
Por cierto, al hilo de las grutas, su exploración y análisis han dado muchas satisfacciones paleontológicas. Anota en tu cuaderno de viaje la visita al Centro Paleomágina, en Bedmar. ¡Te sorprenderá!
A tiro de piedra, otra formidable formación vegetal coloniza la zona, es el Cornicabral de Mágina. Situado en la vertiente norte del Cerro de La Carluca, este bosque está considerado como el mayor cornetal de Europa. Mágico y singular, su extensión supera las mil hectáreas entre los núcleos de Cuadros y Albanchez de Mágina.
El arbusto, que llega a alcanzar una altura de cinco metros, recibe su curioso nombre por el gran parecido de sus agallas, una protuberancia que surge de las ramas, con los cuernos de este animal. La singularidad de este cornicabral radica en la existencia de pocas concentraciones vegetales tan puras y extensas como la de Mágina.
De hoja caduca, estos árboles ofrecen una mezcla de colores otoñales explosiva durante los últimos meses del año. Especialmente densa es la población ubicada en las umbrías de los barrancos del Perú y del Mosquito, desde cuyas cuerdas puede apreciarse una panorámica montañosa inimaginable: Pico Mágina, Cárceles, Arnaitín, Serrezuela de Bedmar… ¡Atrévete, descubrirás el duende!