Castillo de Castellar
El Castillo de Castellar se alza sobre un cerro de empinadas laderas en pleno Parque Natural de Los Alcornocales, entre los ríos Guadarranque y Hozgarganta, divisando el embalse del Guadarranque y los bosques de sus laderas, así como Gibraltar y el estrecho, a las afueras del actual emplazamiento de la localidad de Castellar de la Frontera, en Cádiz.
Esta fortaleza árabe construida en el siglo XIII se encontraba en una posición de frontera, defendiendo el reino de Taifas, de Algeciras. Fue antigua residencia de los Condes de Castellar.
Su planta es de forma irregular y posee un recinto amurallado con barbacanas, cubos, torres de flanqueo y torres de ángulo cuadradas y circulares, algunas de ellas coronadas con almenas. Destacan las torres de su entrada, con elementos defensivos como las barbacanas que defienden el acceso del castillo, perforadas con saeteras y una puerta en recodo abierta bajo un bello arco peraltado enmarcado por otro de herradura.
Desde el pequeño patio de armas se accede al caserío interior, con casas blancas y calles estrechas y sinuosas cuajadas de flores. Entre los edificios destacan el alcázar de los Condes de Castellar, con la torre del Homenaje, el Ayuntamiento y la Iglesia del Divino Salvador, de estilo barroco. Más bien parece una alcazaba, en la que el castillo sería la zona militar separada de la zona administrativa y civil.
Del Castillo de Castellar Viejo se conserva en buen estado la entrada, con arcos de herradura, que daba paso al recinto dentro del cual se cobija el poblado al amparo del castillo. Fue restaurado parcialmente en el año 1979.
Fue declarado Bien de Interés Cultural con la categoría de Monumento en 1949.
Entrada Libre en horario ininterrumpido.