Colegio de la Sangre

El Colegio de la Sangre, que también fue hospital, fue mandado construir por Don Juan de Ribera, como albacea del testamento de su padre, Don Per Afán de Ribera, para dar asilo a los escuderos, criados ancianos y enfermos de la Casa Ribera.

El edificio se terminó de construir en 1597. Consta de una sola planta, con patio central en torno al que se distribuían las distintas dependencias. En el ala sur contaba con ricos huertos y jardines.

El Colegio de la Sangre fue reconstruido por el Ayuntamiento y actualmente se destina a extensión del Instituto de Enseñanza Secundaria "El Convento" y guardería infantil.